Distraer la mente en Bici, por la vida.

Nuestros pueblos Andinos hoy celebran un nuevo año, un nuevo comenzar cada día, es un nuevo sueño una experiencia de vida en medio de tantas situaciones  que nos ha tocado afrontar  en estos últimos tiempos. Sentimos la necesidad de empezar nuestros recorridos aun sabiendo que hay leyes que nos lo prohíben.

Al salir de Bogotá, en busca de aventuras de conocimiento, podemos encontrar muchas cosas que le duelen o le alegra a uno la vida. La gente se preocupa por su seguridad, por la vida misma, pero, a la vez hace cosas que no se pueden explicar cómo comprar supuestas promociones, arriesgándose contaminarse del famoso COVID, pero, les da pereza salir a hacer deporte, y las mismas autoridades de gobierno, autorizan aglomeraciones y prohíben hacer deporte. en fin, me estaba desviando parta contarles lo que vive rápidamente en mi salida en bicicleta hacia Madrid Cundinamarca.

Hoy En medio de la cuarentena salimos a realizar un recorrido por nuestros campos y caminos y en cada paraje solitario y dónde en algún momento se veía lleno de turistas, parqueamos nuestras bicicletas y nos sentamos a tomar un poco de agua,  para calmar nuestra sed de vida.

Un día de salir a evitar morir en vida encerrados y arriesgarse a salir a disfrutar en medio de esta penumbra de que el mundo está ahí pero, que nos niegan las posibilidades de disfrutarlo, de repente la policía nos para, decimos que vamos a “producir” que estamos trabajando “, entonces nos dicen bien puedan pasen, y a los que van uniformados en  el mismo plan pero a otro nivel,  de querer ser libres y hacer deporte fuertemente, les niegan la salida de la ciudad.

Al parecer, la situación está así; “Si produces y no abandonas la cadena de producción neoliberal puedes vivir y ningún virus te va a atacar o amenazar pero, si quieres salir y de esa esa cadena y no producir si no vivir, entonces no podes salir,  ahí si el virus te puede atacar.”

Cada paisaje que observamos nos recuerda que vamos de paso y por eso  disfrutamos de cada elemento que miramos. Aunque, para algunos

seres  pareciera que la felicidad  en éste mundo ha sido negada, es el caso de un  canino que  con su mirada perdida pero, a la vez llena de esperanza en nosotros, en un paradero solitario, intenta manifestar que quiere un ratito de compañía, porque quizás está esperando a su amo que nunca llegará. Así trascurre nuestra vida llena de felicidad con un futuro prometedor de que vendrán cosas mejores.

Monumentos a la vida y a la muerte, a la vez. Hoy primer día de un nuevo periodo lleno de energías y vida para saberla vivir. Vida para gozarla así la humanidad este en medio de una crisis existencial, una crisis de mil cosas que deberían cambiar, pero, cuando pase el tiempo, la vida nos dirá que paso realmente. Mientras tanto les invitamos a seguir Jogoniando y recapitulando cada día, cada instante lo que somos hacemos, queremos y sentimos que debería hacerse.

Josesito, pedaleando por la vida.

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar también...
22 junio, 2020