Natalia Franco Ocampo, descendiente de sangre Piendamoneña, pero, quien nació y vive actualmente en la ciudad de Popayán, es una joven enamorada del arte de la música; como intérprete de instrumentos, profesora, directora de coros infantiles y quien dé a pocos ha incursionado en el canto y el piano, llevando consigo la música andina, colombiana, alternativa, esa música que poco se escucha, pero, que es muy especial, la música que es compañía en el alma y que cuando se escuche deje mensajes positivos a todo el mundo.
Natalia es licenciada en música y según nos cuenta, ese don de la música y de cantar es una de las cosas en las que cree por la cual vino a este mundo, a difundir canciones que hablan de la vida, de la naturaleza, de la convivencia entre seres vivos en este planeta, y a dejar una enseñanza a través de este arte.
Además, lleva en su sangre el arte de la música combinado con el don de compartir, enseñar a vivir, logrando llegar a otros, especialmente a los niños y jóvenes, a los cuales les enseña, los lleva a seguir el bonito camino de la música, que es el camino de la vida bonita.
Desde hace algún tiempo los géneros musicales se confunden y se mezclan. Muchas veces, sobre todo para los no iniciados, discernir entre rock, pop, electrónica o experimental, lo andino, alternativo, propio de la comunidades, lo tradicional se mezcla con la modernidad en la instrumentalización pero, en medio de todo, esto se rescatan cantantes y músicos que marcan un poco la diferencia, no tanto en definir ritmos y clases si no en dejar un mensaje claro, y llenador que resulte favorable a la construcción de una sociedad mejor, eso creemos en JOGONIANDO.ORG, y esperemos seguir marcando la diferencia con artistas como Natalia y su nuevo surgir con música que llena el corazón y el alma. Tal vez sea esta una de las razones por las cuales hoy presentamos a Natalia Franco, y les invitamos a todos a que sigan explorando en este mundo fantástico de encontrar buena música, diferente, pero, que guste a todos, eso esperamos. Con gusto seguimos Jogoniando.
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